Determina tus pensamientos
Observa el campo de batalla de tu mente.
Pensamientos inútiles se oponen con fuerza a los poderosos. Mientras unos minan tu estado interno, los otros se convierten en tu fortaleza.
Un único puro y poderoso pensamiento puede cambiar lo imposible en posible, para lo cual usa tu mente para ponerla a tu servicio, y jamás debe controlarte o perjudicarte.
Un ratito pensando en negativo te lleva a que tu cara se apague, y a fruncir el ceño, generando una disminución de energía o cierta desgana para hacer algunas cosas. Por ello, es importante que protejas tus pensamientos, ya que ellos determinan tu forma de actuar y tu destino.
Tienes que dilucidar entre cuáles te conviene tener en tu mente y cuáles debes deshechar por tu bien. Todos los acontecimientos que vivimos, ya sean buenos o malos, nos ayudan a ir forjándonos nuestro camino en la vida.
Para cambiar tu vida, debes empezar por modificar tus pensamientos. Insiste continuamente en los pensamientos de aquello que deseas y visualiza lo que quieres, porque al pensar en ello, los alimentas y aumentas en tamaño, ya que los pensamientos tienen la facultad de construir lo que es compatible con ellos.
Reflexiona sobre la clase de de pensamientos recurrentes que tú crees son un impedimento en tu vida e intenta anularlos cada vez que se presenten.
Vigila de vez en cuando los pensamientos en que se ocupa tu mente y permite que tu atención se centre sólo en todo lo que puede resultar positivo para tu vida.
Aquí y ahora…